Jueves 29:
Nos levantamos y fuimos a la estación de trenes, donde ya estuvimos el día anterior comprando el billete de un tren más barato (y lento) de lo normal que salía a las 10:55, aunque no aparecía en los horarios. Llegamos allí y la información sobre el tren es inexistente. Se mascaba la tragedia y cuando en el punto de información nos dijeron que ese tren verdaderamente no existía las cosas no parecieron mejorar. ¿El timo de la estampita en versión oficial? No se, sea como fuere había otro tren lento quince minutos más tarde (11:10), que fue el que finalmente cogimos.
El viaje, en un tren antiguo pero molón (casi nadie viajaba en él), entre la siestecita de rigor, leer, hablar, ver el paisaje, etc. no se nos hizo nada largo así que llegamos bastante frescos a Cracovia.
Nada más llegar al hostal nos hicieron el lío diciéndonos que la habitación compartida que teníamos reservada estaba completa pero que tenían una doble por un poco más. Al final accedimos y por 3 euros más (entre las dos noches) dormimos en una doble que estaba muy bien. El hostal estaba bien pero probablemente por ser nuevo era casi más rollo hotel, sin ese ambiente especial que tienen los hostales juveniles (¡todavía soy joven! No sé si os habéis fijado, pero a los 26 te empiezan a cobrar como adulto en un cojón de cosas...).
Nuestro primer paseo nocturno (no tanto por ser de noche como por la falta de luz) por Cracovia desbordó mis expectativas. Verdaderamente es una ciudad bonita y llena de vida (y estudiantes).
Tras cenar bastante pronto decidimos tomar el pulso a los bares de heavy/rock de la ciudad y ver si mejoraban lo visto en Varsovia. Los resultados del primer bar que pusimos a prueba no podían ser más descorazonadores; el "LochNess" primero nos obsequió con una actuación en acústico bastante pobretona para luego poner la misma mierda que se podría escuchar en un prospekto cualquiera. ¡Que baje Dios y se atreva a decirme que mi cólera no es justificada cuando empieza a sonar R&B o regeton! Como alma que lleva el diablo salímos del mal llamado "Rock bar".
Para aumentar la confusión, mientras eso ocurría en ese bar de rock, en uno llamado "Jazz Rock" ponían metal. No comment.
Continuamos nuestro aventura con el siguiente bar en nuestra lista; "The Tower", donde si se daba lo que se prometía (rock y metal) aunque en la sala principal la música dependía de un jukebox cuyo coste era de unos 22 centimos por canción. Y si bien es un gustazo poner un temita de U.D.O. no es menos cierto que había un brasazas con un gusto musical nulo y cuyas selecciones comprendieron desde un par de temas del disco de Metallica con la orquesta (¡¡!!) hasta el puto "Losing my religion" de zzzzzz.
Despues de tomar una o dos cervezas fuimos al último bar de metal de nuestra lista "Progressija", donde no había mucha gente pero el ambiente era netamente metalero. La música era demasiado extrema para mi gusto pero como estuvimos hablando con el camarero y un habitual del bar, se nos hizo muy ameno. Con este último quedamos en volvernos a ver la noche siguiente en el mismo bar.
Salimos del bar y quedamos con el grupo de erasmus que vimos en Varsovia, pues ellos también se encontraban en esemomento en Cracovia. Era bastante pronto (no debían ser más de las 23-24 horas) y nos fuimos a un club donde nos encontramos a un grupo de españoles que estaba de erasmus en el norte de Polonia, no recuerdo el nombre de la ciudad. Al de un par de horas Micha y servidor nos piramos al hostal.
Al llegar al hostal encaminamos nuestros pasos a la cocina, donde nos esperaba una sorpresa.
Pero esa es otra historia...
4 comentarios:
Nuestros recuerdos de Cracovia con el interrail no son tan buenos. Cierto es que "dormimos" en el tren y no llegamos en condiciones óptimas para ver la ciudad (por cierto, es bastante divertido intentar colarse en las iglesias donde los muy jinchos te cobran!).
Por la noche fracasamos bastante: íbamos con un chico colombiano y no nos dejaron entrar en ningún sitio;puede que influyera que dos de nuestros amigos fueran en bermudas...pero a veces nos dejaban pasar a todos menos al colombiano.Un poco raro.
Aunque sólo probamos en la calle principal -- no en el barrio judío, en teoría más alternativo-- y era julio y no había mucha gente ni erasmus.
Al día siguiente fuimos a Austwich, para terminar de alegrar la visita.
Pero sí que es una ciudad bonita, pese a todo.
La pregunta es ¿fuisteis a bares de rock?
Pues eso.
en krakow visitamos el antiguo barrio comunista, preguntando a la gente del lugar cómo llegar . nos vinieron a decir que qué se nos había perdido por allí, porque no era un barrio especialmente turístico - bloques de edificios soviéticos, supermercados jinchos,etc.- pero nos indicó una chica bastante simpática que se iba partiendo de risa de que quisiéramos visitar su barrio.
como resultado positivo de la visita, una bolsa GIGANTE de gusanitos ( marca cheetos-sovieticos) que compramos en un super, y que fuimos degustando durante el paseo. hay fotos que atestiguan su tamaño.
por lo demás , veo que metales conductores continúa investigando allende los mares en busca de nuevos horizontes metaleros. os deseo mejor suerte que la encontrada hasta ahora¡
p.s. no seas perro y suelta prenda de las salidas buenas.
Pues a mi Cracovia me encantó, ya te dije. El Prozac es un garito no metalero pero la música no la recuerdo mala, un poco laberíntico y muy divertido. Disfruté mucho con la bici y superaba el sueño acumulado con redbulles...
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